La drástica reducción de las visitas comerciales presenciales a causa de la pandemia está obligando a los vendedores a reinventarse. Deben convertirse en lo que llamamos “vendedores híbridos”, perfiles que se mueven con soltura y son capaces de combinar con facilidad las habilidades y técnicas de la visita presencial con las habilidades digitales y de la venta en remoto.